El popular youtuber Carter Sharer, con más de 11 millones de suscriptores, adquirió un supuesto Bugatti Veyron por 30.000 dólares en Alibaba. La oferta era tentadora, ya que incluso un Bugatti en mal estado difícilmente baja de los 300.000 dólares. Sin embargo, el unboxing del vehículo resultó ser una sorpresa inesperada.
Tras meses de espera, Sharer recibió un enorme cajón de madera. Con ayuda de su equipo, TeamRAR, lo abrieron para revelar una silueta que, a primera vista, recordaba a un superdeportivo. Sin embargo, al retirar el envoltorio, quedó al descubierto una carcasa de espuma y plástico barato, sin motor, puertas funcionales ni elementos reales de automóvil. La réplica de baja calidad no cumplía en absoluto con las expectativas.
Pese a lo que podría parecer una estafa de manual, el youtuber aprovechó el incidente. El vídeo del unboxing rápidamente superó el millón de visualizaciones, haciendo que la inversión inicial se convirtiera en una ganancia gracias al aumento de visibilidad y los ingresos generados por su canal.
Este incidente subraya la importancia de ser cauteloso con ofertas en línea que parecen demasiado buenas para ser ciertas. Mientras que creadores de contenido como Sharer pueden permitirse estos experimentos, los consumidores comunes deben extremar las precauciones ante anuncios sospechosos.
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