El ranking QS World University 2026, que clasifica a 1.501 universidades globales, incluye solo 38 instituciones españolas, revelando deficiencias significativas en la preparación laboral de sus graduados. La Universitat de Barcelona, la mejor posicionada de España, aparece en el puesto 160, destacando por su reputación académica y sostenibilidad, pero con una baja empleabilidad.
Las universidades españolas enfrentan críticas por su limitada investigación y falta de apoyo al estudiante, además de concentrarse principalmente en Madrid y Barcelona, dejando otras áreas del país desatendidas en educación de calidad. En términos de experiencia de aprendizaje, las instituciones españolas obtienen puntuaciones inferiores al 50%, reflejando un insuficiente apoyo estudiantil.
El estudio resalta la importancia de la empleabilidad, un área donde las universidades españolas también muestran debilidades. Aunque algunas como la Complutense de Madrid y la Universidad de Navarra puntúan relativamente bien, la mayoría están por debajo de los estándares globales. La Universitat de Barcelona, por ejemplo, tiene una reputación entre empleadores del 48% y 77 puntos en preparación laboral, cifras que reflejan las dificultades de las instituciones para ofrecer una formación laboralmente relevante.
El informe sugiere que las universidades con mejores resultados en empleabilidad tienen fuertes lazos con la industria y una sólida reputación entre empleadores, aspectos que las universidades españolas deben mejorar para aumentar la competitividad de sus graduados en el mercado laboral global.