
La Policía Nacional ha lanzado una campaña para alertar sobre los peligros del sharenting, la práctica de compartir fotos de menores en redes sociales. Aunque parece un gesto inocente, puede tener graves consecuencias para la privacidad y seguridad de los niños. Un 89% de los padres publica imágenes de sus hijos al menos una vez al mes, y el 72% del material incautado a pedófilos son fotos cotidianas subidas por las propias familias. Los riesgos incluyen pérdida de privacidad, ciberacoso y el uso de imágenes para crear perfiles falsos o contenido pedófilo. La campaña insta a los padres a reflexionar antes de publicar y a proteger la privacidad de los menores. Se recuerda que, aunque legal, los padres deben actuar en el interés superior del menor y ser responsables con el uso digital. La concienciación y el respeto a la intimidad de los niños son fundamentales para evitar consecuencias negativas.