Un usuario de Windows 11 relata cómo identificó el deterioro de su SSD tras notar una ralentización en su ordenador, especialmente al actualizar el sistema o copiar archivos. Inicialmente, atribuyó estos problemas a actualizaciones del sistema o posibles virus, pero finalmente centró su atención en la unidad de almacenamiento.
Al usar el comando «chkdsk» en el símbolo del sistema, no encontró problemas aparentes, lo que le llevó a utilizar CrystalDiskInfo, una herramienta que ofrece una lectura detallada de los atributos S.M.A.R.T. del disco. Esta aplicación reveló que el estado de salud del SSD estaba por debajo del 40% y presentaba sectores defectuosos y errores de lectura.
Con esta información, decidió reemplazar la unidad, lo que resolvió los problemas de rendimiento, dándole una nueva vida a su equipo. Esta experiencia subraya la importancia de herramientas de diagnóstico para identificar problemas en el hardware antes de que se conviertan en fallos críticos.