Un ingeniero de software de Google, llamado Brandon, decidió vivir en un camión dentro del aparcamiento de la empresa para evitar el alto costo del alquiler en San Francisco. Tras mudarse desde Massachusetts a los 23 años para trabajar en Google, encontró que el precio de una vivienda era extremadamente caro, llegando a costar 2.000 dólares mensuales por una habitación compartida.
Para ahorrar dinero, Brandon compró una camioneta Ford de 2006 por 10.000 dólares y vivió en su interior durante seis años. Con esta medida, logró ahorrar el 90% de su sueldo, que ascendía a 150.000 dólares anuales. Usaba las instalaciones de Google para sus necesidades diarias, como ducharse y comer, y cargaba sus dispositivos electrónicos en el trabajo.
La empresa no puso inconvenientes, y Brandon se benefició de no tener que preocuparse por el alquiler, solo por el seguro de su vehículo. Aunque al principio la seguridad del campus se mostró sorprendida por el camión estacionado, al comprobar que era empleado, no hubo más problemas.
A pesar de esta peculiar forma de vida, Brandon finalmente dejó el camión para vivir en una casa, describiendo el cambio como ‘el fin de una era’. Su historia resalta las dificultades de encontrar vivienda asequible en San Francisco y la creatividad para sortear los altos costos de vida.
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