
Google está transformando su motor de búsqueda tradicional hacia un modelo impulsado por inteligencia artificial (IA), denominado Modo IA. Este nuevo sistema ofrece respuestas directas y contextualizadas en lugar de una lista de enlaces, convirtiendo al buscador en un interlocutor capaz de mantener conversaciones y recordar el historial de consultas del usuario. Además, permite interacciones multimodales mediante voz, imágenes y cámara.
El Modo IA también introduce funciones avanzadas como desglosar preguntas complejas en subtemas, visualizar información con mapas y gráficos interactivos, y realizar acciones prácticas como reservar mesas en restaurantes. Algunas de estas funciones están ligadas al plan de pago AI Ultra.
Para los medios y creadores de contenido, este cambio representa un desafío ya que los usuarios podrían resolver sus consultas dentro del ecosistema de Google sin visitar las webs originales, lo que afectaría al tráfico y las impresiones publicitarias.
El despliegue del Modo IA ya está en marcha en más de 180 países, especialmente en Hispanoamérica, pero aún no ha llegado a la Unión Europea, posiblemente por cuestiones regulatorias. Se espera su llegada a Europa en los próximos meses. Inicialmente solo está disponible en inglés, aunque se ampliará a más idiomas próximamente.