
Los nuevos Pixel 10 de Google incorporan la tecnología Qi2, un estándar de carga inalámbrica que utiliza imanes para mejorar la alineación y velocidad de carga. Esta innovación permite también el uso de accesorios magnéticos bajo el nombre de Pixelsnap. Sin embargo, a cambio, los dispositivos han perdido la función de carga inalámbrica inversa, presente desde el Pixel 5, que permitía usar el móvil para cargar otros dispositivos.
Google ha explicado que la inclusión de imanes necesarios para Qi2 impide la implementación de la carga inversa. Mientras que Apple podría integrar ambas tecnologías en futuros iPhones, los Pixel 10 actuales no ofrecen ni siquiera carga inversa por cable, a diferencia de los iPhone 15 con puerto USB-C.
Además, no todos los modelos Pixel 10 tienen la misma velocidad de carga. El Pixel 10 Pro XL, con Qi2.2, alcanza 25W, mientras que otros modelos como el Pixel 10, Pixel 10 Pro y Pixel 10 Pro Fold, con Qi2, solo llegan a 15W. Aunque la carga inalámbrica inversa no era muy popular, su eliminación ha sorprendido a los usuarios.