
Los hackeos en Instagram son cada vez más comunes, afectando a usuarios de todos los niveles. Para saber si tu cuenta ha sido comprometida, busca señales como la imposibilidad de iniciar sesión, publicaciones desconocidas, mensajes extraños a tus contactos, cambios en tu información de cuenta o inicios de sesión desde ubicaciones inusuales.
Para proteger tu cuenta, utiliza contraseñas seguras, activa la autenticación en dos pasos, evita redes WiFi públicas y no abras enlaces sospechosos. Mantén la app actualizada y revisa los dispositivos conectados a tu cuenta.
Si tu cuenta ha sido hackeada, intenta recuperarla desde la app usando la opción «¿Has olvidado tu contraseña?» e introduce tu usuario, email o teléfono para recibir un enlace de recuperación. Si no tienes acceso a estos datos, utiliza el enlace https://www.instagram.com/hacked o selecciona «Mi cuenta fue hackeada» desde la app, proporcionando una contraseña antigua para verificar tu identidad. En casos extremos, Instagram puede solicitar una videollamada selfie para confirmar que eres el titular de la cuenta.
Una vez recuperada, cambia tu contraseña, activa la verificación en dos pasos y elimina dispositivos sospechosos. También es recomendable denunciar el hackeo y contactar con el INCIBE para asistencia en ciberseguridad. Si necesitas más ayuda, utiliza el formulario de soporte de Instagram o contacta con Meta.