El Chromecast de Google, conocido por transformar televisores en Smart TV, puede conectarse a Internet no solo por WiFi, sino también mediante un cable Ethernet, una opción que aporta ventajas significativas. Esta conexión es especialmente útil en áreas con baja cobertura WiFi, proporcionando una mayor velocidad y estabilidad, crucial para el streaming de alta resolución y juegos en línea.
Los modelos Chromecast Ultra y Chromecast con Google TV permiten esta conexión, aunque requieren un adaptador que combina la alimentación del dispositivo con un puerto Ethernet. Google vende un adaptador oficial por 19,99 euros, aunque su puerto Ethernet tiene una velocidad máxima de 100 Mbps, lo que podría ser más lento que un WiFi rápido. Sin embargo, existen adaptadores de terceros que ofrecen puertos de 1 Gbps, disponibles en tiendas online con precios similares.
Para establecer la conexión, el adaptador oficial se conecta al Chromecast y al cable Ethernet, mientras que los adaptadores de terceros requieren conectar tanto el adaptador como el cable de corriente y el Ethernet al Chromecast. Esta configuración es sencilla y mejora significativamente la experiencia de uso en términos de velocidad y estabilidad, permitiendo aprovechar al máximo la capacidad del Chromecast en entornos con conexión WiFi deficiente.