Apple ha decidido participar en el programa de subsidios del gobierno chino, permitiendo a los consumidores obtener descuentos de hasta 2.000 yuanes en productos como iPhones, iPads y Apple Watches. Este movimiento surge en un contexto donde Apple enfrenta desafíos de ventas en China. Mientras marcas locales como Xiaomi y Huawei han incrementado sus ventas, Apple ha experimentado una caída del 9% en el primer trimestre de 2025, bajando al quinto lugar en el mercado.
El programa chino busca fomentar el consumo interno con un 15% de subsidio para dispositivos que cuesten menos de 6.000 yuanes. Sin embargo, los descuentos están limitados a 500 yuanes por artículo. Apple ha aprovechado esta oportunidad al incluir modelos como el iPhone 16 y 16e, cuyo precio se ajusta al límite del programa.
Curiosamente, el programa solo está disponible en Pekín y Shanghai, con reglas específicas para cada ciudad: sólo compras online en Pekín y solo en tiendas físicas en Shanghai. Esto se debe a que los fondos del programa se han agotado en otras regiones debido a su popularidad.
Esta decisión de Apple llega en un momento crítico, ya que enfrenta problemas de competitividad en el mercado chino, donde la integración de inteligencia artificial y precios más bajos de sus competidores han dificultado su posición. Además, la guerra económica entre Estados Unidos y China añade presión, aunque Apple sigue buscando oportunidades estratégicas para mantenerse relevante. Esta jugada refleja la habilidad de Apple para adaptarse a las condiciones del mercado global, buscando maximizar ventas en un entorno competitivo y complejo.
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