
Strava, una popular aplicación de fitness, ha sido utilizada de manera inapropiada por miembros de seguridad en los países nórdicos, exponiendo datos sensibles de líderes gubernamentales y de la familia real. Un diario sueco descubrió que los guardaespaldas del primer ministro de Suecia, Ulf Kristersson, y otros agentes del servicio secreto, mantenían sus perfiles de Strava en modo público. Esto permitió rastrear sus movimientos, revelando información crítica sobre encuentros y viajes privados, incluyendo detalles de la residencia del primer ministro.
El problema radica en que los agentes publicaban sus rutinas de entrenamiento sin restricciones de privacidad, haciendo accesible la ubicación de lugares frecuentados por las máximas autoridades. En al menos 35 ocasiones, se compartieron datos que podrían vincularse directamente con Kristersson. Esta exposición de información no solo pone en riesgo la seguridad personal de los líderes, sino que también podría ser utilizada para planificar ataques.
La situación es particularmente preocupante dado que esta vulnerabilidad ha estado presente durante años, afectando no solo al primer ministro, sino también a la familia real y otros representantes del gobierno. La revelación subraya la necesidad de una gestión más rigurosa de la privacidad digital dentro de los cuerpos de seguridad.