Apple ha lanzado el Watch Series 11, un modelo que mantiene la misma línea del Series 10, sin grandes revoluciones. Las principales diferencias se centran en el hardware: el nuevo dispositivo ofrece una mayor autonomía, pasando de 18 a 24 horas de uso, y una pantalla más resistente a arañazos, especialmente en los modelos de aluminio. Además, los modelos Cellular ahora son compatibles con redes 5G.
En cuanto a las funciones de salud anunciadas, como las notificaciones de hipertensión y la métrica de Calidad del Sueño, estarán disponibles también para modelos anteriores, incluido el Series 10, a través de la actualización de watchOS 26. Esto significa que, a nivel de software, no hay exclusividades significativas que justifiquen el cambio si ya se posee un Series 10.
La decisión de Apple de mantener el mismo chip S10 en ambos modelos indica que no hay mejoras en rendimiento o velocidad. Por tanto, las razones para considerar el Series 11 se limitan principalmente a la mejora en la duración de la batería y la durabilidad de la pantalla.
Para aquellos que poseen un Apple Watch Series 9 o anterior, el cambio al Series 11 puede ser notable, especialmente por la mejora en autonomía. Sin embargo, para los usuarios del Series 10, las mejoras no son lo suficientemente significativas como para justificar la actualización.
El Apple Watch Series 11 está disponible para reservas, con un precio a partir de 449 euros, y estará en tiendas desde el 19 de septiembre.