YouTube ha comenzado a aplicar de manera más estricta su normativa sobre el uso del plan familiar de YouTube Premium, que exige que todos los miembros del plan vivan en el mismo domicilio. La compañía ha empezado a notificar a los usuarios que no cumplen con este requisito, advirtiendo que sus cuentas podrían ser suspendidas si no demuestran lo contrario.
Hasta ahora, muchos usuarios compartían sus suscripciones con personas fuera de su hogar, pero YouTube ha decidido tomar medidas para evitar estas prácticas. Los afectados recibirán un correo avisando de la suspensión de su membresía si no residen en el mismo domicilio que la persona responsable del plan familiar.
Esta política no es nueva y se asemeja a la de otros servicios de streaming que también exigen que los miembros de un plan familiar vivan juntos. Sin embargo, algunos servicios, como Netflix, permiten agregar miembros externos por un costo adicional.
YouTube ofrece la posibilidad de apelar la suspensión a través de su página de soporte, donde los usuarios pueden confirmar su residencia en el mismo domicilio para seguir disfrutando de los beneficios. De lo contrario, perderán el acceso a características como ver vídeos sin anuncios, descargar contenido y usar YouTube Music.
Estas medidas llegan en un momento en que YouTube explora nuevas opciones de suscripción más económicas, como una versión ‘Lite’ que excluye algunas funciones del plan completo. Mientras tanto, YouTube continúa ajustando sus estrategias para garantizar que sus servicios se utilicen según las normas establecidas.
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