ARM ha desarrollado una tecnología llamada Neural Super Sampling (NSS) que promete mejorar la calidad gráfica de los videojuegos en móviles Android. Inspirada en el DLSS de Nvidia, esta técnica utiliza inteligencia artificial para reescalar imágenes, permitiendo que los juegos se ejecuten a resoluciones más bajas y luego se reconstruyan a alta calidad. Esto reduce la carga de trabajo de la GPU hasta en un 50%, lo que se traduce en mejores gráficos, mayor fluidez o menor consumo energético.
El NSS se integrará en las GPUs de ARM a partir de 2026, proporcionando una base común que evitará la fragmentación del mercado. ARM ya ha lanzado un kit de desarrollo para facilitar la adopción de esta tecnología por parte de los desarrolladores de videojuegos. Sin embargo, su éxito dependerá de la aceptación por parte de fabricantes y desarrolladores.
Con esta innovación, ARM busca ofrecer a los usuarios de Android una experiencia de juego más cercana a la de consolas y PCs, allanando el camino para un futuro donde los juegos móviles no tengan que sacrificar calidad gráfica.