El Pentágono ha detectado una posible conexión entre el ejército chino y BOE, un proveedor de pantallas de Apple, lo que podría afectar la relación comercial entre ambas empresas. Esta situación surge en un momento crítico para Apple, que depende de BOE para las pantallas OLED de modelos como el iPhone 16 y el próximo iPhone 17.
BOE, que hasta ahora ha sido un proveedor secundario por detrás de Samsung y LG, se enfrenta a problemas adicionales debido a una denuncia de Samsung por revelación de secretos comerciales. Esta situación ha llevado a la Comisión de Comercio Internacional de EE.UU. a emitir una orden de exclusión que podría prohibir la venta de iPhones con pantallas de BOE en Estados Unidos.
El proyecto de ley de defensa estadounidense incluirá una enmienda que pide al Pentágono evaluar si BOE debería ser clasificada como una empresa que «ayuda al ejército chino». Esto podría interrumpir el suministro de pantallas a Apple, afectando no solo al iPhone 17, sino también a modelos anteriores como el iPhone 16.
En caso de que BOE sea sancionada, Apple tendría que recurrir a otros proveedores como Samsung y LG para cubrir la demanda, lo que podría causar retrasos en los envíos. La situación refleja las crecientes tensiones entre Estados Unidos y China, y cómo estas afectan a grandes corporaciones tecnológicas como Apple. El futuro de esta relación dependerá de las decisiones del Congreso estadounidense.
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