
El ‘vamping’ es el uso de dispositivos electrónicos durante la noche en lugar de dormir, un fenómeno que afecta tanto a adolescentes como a adultos. Esta práctica se ha vuelto común, especialmente en vacaciones, cuando los jóvenes suelen aprovechar para usar sus móviles, redes sociales o ver series hasta altas horas.
Las consecuencias del ‘vamping’ son significativas. La falta de sueño repercute en la salud física y mental, provocando dolores de cabeza, estrés, ansiedad y afectando el rendimiento académico y laboral. Además, altera los ritmos circadianos, lo que puede llevar a trastornos del sueño.
Estudios indican que el uso del móvil en la cama retrasa el sueño y está vinculado con problemas de irritabilidad y depresión. Muchos adolescentes se despiertan por notificaciones durante la noche, lo cual afecta la calidad de su descanso.
Para combatir el ‘vamping’, se recomienda dejar los dispositivos fuera del dormitorio y silenciar notificaciones por la noche. Es esencial crear conciencia sobre la importancia de dormir adecuadamente y fomentar rutinas saludables, además de ofrecer apoyo desde el entorno cercano para superar esta adicción a las pantallas.