Una investigación de la empresa de ciberseguridad Bitsight ha revelado la existencia de más de 40.000 cámaras de seguridad expuestas en internet sin protección, un riesgo significativo para la privacidad y seguridad de las personas. Las cámaras, que incluyen dispositivos en hogares, oficinas, fábricas e incluso en transporte público, pueden ser vistas por cualquier persona sin necesidad de técnicas avanzadas de hacking, simplemente a través de un navegador web al encontrar la dirección IP de la cámara.
La mayoría de estas cámaras expuestas se encuentran en Estados Unidos y Japón, con 14.000 y 7.000 cámaras afectadas respectivamente. Otros países afectados incluyen Austria, República Checa, Corea del Sur, Alemania, Italia y Rusia, con alrededor de 1.000 cámaras expuestas en cada uno.
El informe de Bitsight destaca casos especialmente preocupantes, como cámaras en hospitales, clínicas y cajeros automáticos, lo que supone riesgos graves para la privacidad de los pacientes y la seguridad de los clientes bancarios. Además, se ha descubierto que en la dark web se comparten cámaras expuestas.
Para protegerse, se recomienda cambiar los nombres de usuario y contraseñas por defecto de las cámaras por alternativas seguras, mantener el software actualizado y desactivar el acceso remoto a menos que sea imprescindible. Estas medidas son cruciales para asegurar que las cámaras no sean ventanas abiertas al interior de nuestros hogares y lugares de trabajo.